Por: Janeth Morales
Cuando hablamos de dar el gran paso de salir del nido, no es nada fácil. Tomar una decisión así puede ser algo enriquecedor y emocionante en nuestra vida o tal vez generarnos estrés o temor a lo que no conocemos. Tengo que admitir que he vivido ambos estados.
Mudarme de mi país natal para empezar a conocer culturas nuevas, ha sido una de las experiencias de vida mas grandes, pude viajar, aprender idiomas y ser una agente activa de diferentes realidades. Sin duda, ha sido un parte aguas en mi formación personal y profesional.
Debemos estar preparando a nuestros estudiantes para abrirse al mundo, aunque no siempre podemos estar de manera física en los lugares, si tenemos un mundo digital que nos acerca a nuevas culturas, la invitación es a aprovecharlas, para abrir nuestro panorama cultural y fortalecer nuestra empatía, así como ampliar nuestros horizontes.
Les comparto una foto muy querida, con mi Papá, quien me pudo visitar y se percató que todo iba bien, había sembrado en mi valores para saber aprovechar las oportunidades que la vida me presentaba y su apoyo había rendido frutos.
Segovia, España. 2009.